En compañía de nuestros «santos»

Cada día las encargadas de la liturgia evidencian de modo particular un momento de la Celebración eucarística: ayer Biblias en varias lenguas fueron llevadas en procesión antes de la proclamación de la primera lectura, hoy estamos invitadas a pedir juntas perdón por nuestras cegueras, confiadas que el Señor nos sanará tomándonos de la mano como al ciego de Betsaida. Como don Alberione nos sentimos los semi-ciegos que el Señor ilumina con su luz en el momento oportuno y percibimos que gradualmente nos muestra dónde quiere conducir a su congregación. A nosotras nos toca permanecer en escucha de la Palabra, del mundo actual, del magisterio de la Iglesia, de la vida de nuestras comunidades y de las luces que cada intercapitular comunica en grupo o en asamblea.

El celebrante de esta mañana, el Padre José Antonio Pérez, sacerdote paulino y postulador general de la Familia Paulina, nos ha recordado el gran regalo que sería para nosotros, para la Iglesia y para el mundo, la proclamación de Alberione santo y de Maestra Tecla beata. Faltan dos milagros. Nos ha invitado a crear en nuestros ambientes un clima más evangélico, que sea signo vivo de la presencia de nuestros Fundadores, solicitándonos a hacerlos conocer más y a hablar de ellos para que la gente pueda dirigirse con confianza a su intercesión.

En la mañana hemos trabajado de nuevo en los grupos continentales para hacer aún más concretas y verificables algunas iniciativas de los proyectos continentales, mientras que en la tarde cada grupo ha dado relación de las clarificaciones y puntualizaciones aportadas a los proyectos.

En estas noches continúa la presentación de iniciativas particulares realizadas en las circunscripciones: los 5 primeros e-book y la Asociación Comunicación y Cultura ONLUS (Italia); el camino comunitario y apostólico de la delegación francesa; los encuentros culturales en la librería en Montreal con una frecuencia anual de aproximadamente 5000 presencias (Canadá/Québec); la inauguración de una sala de conferencias para actividades de animación cultural (Sudáfrica); cursos de formación para animadores parroquiales, docentes y catequistas (Chile); inauguración de una capilla contigua a la librería Paulinas de Puebla (México); la redacción y la impresión de la Biblia en malgache. confiada a las hermanas de nuestra joven delegación por la Conferencia Episcopal Malgache (Madagascar).

«Escuchando» la pasión y la creatividad apostólica que surgen de estas presentaciones, nace espontáneo el canto del Magnificat por las maravillas que el Señor continúa realizando, también a través de todas nosotras, para que su amor sea conocido y acogido por todos.

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