Mons. Domenico Pompili, director de la Oficina nacional para la comunicación social de la Iglesia italiana y entre los promotores del convenio Testigos digitales. Rostros y lenguajs en la era crossmedial,nos ha ayudado brillantemente a «gustar» aún más el tema del Intercapítulo.
Ante todo se ha detenido sobre el significado de habitar respecto al mundo digital. Habitar indica un modo de ser en el ambiente: dar forma a un espacio con responsabilidad y relacionalidad. No es sólo «llenar un espacio» sino «hacer espacio», y esta es una actitud típicamente femenina como el sí de María en la Anunciación. Un sí que ka hace «seno habitado por la Palabra».
En el Evangelio, la mujer María (María, la Cananea, María de Magdala…) es «ambiente» receptivo que hace posible el encuentro. Esto está en perfecta sintonía con la revolución comunicativa producida por la «red» con el paso del modelo unilateral del instrumento-transmisión a un espacio horizontal e interactivo. La red parece valorizar las características femeninas del la acogida, de la escucha, del ser con, sobre todo en su reciente cambio «social» (social Network).
Gran oportunidad apostólica nos ofrece la red a nosotras mujeres consagradas, apóstoles paulinas. Mons. Pompili lo ha subrayado con fuerza, invitándonos a vivir nuestro carisma en el mundo digital, sobre todo en su declinación al femenino: fidelidad creativa y dinámica, inseparabilidad de espiritualidad y misión; sensibilidad al ambiente y a las personas que se traduce en atención humanizadora a las necesidades de la gente; lenguaje afectivo-empático-poético más que riguroso-indiferente-referencial.
Agradecemos de corazón a Mons. Pompili porque su relación ha suscitado una vivaz confrontación sobre las posibilidades que la red abre a la evangelización, permite estar siempre en misión.
En la tarde algunas hermanas nos han comunicado experiencias de gran creatividad y vitalidad apostólica en vivir y anunciar la Palabra. Siguieron cinco intervenciones sobre iniciativas significativas realizadas en los varios continentes: cursos bíblicos por correspondencia (Sor Caterina Chung, Corea); revistas on-line (Sor Joanna Coleiro, Australia); animación pastoral-bíblica (Sor Ninfa Becker, Brasil); compromiso de editar y difundir la Palabra (Sor Mariuccia Pezzini, África); diálogo ecuménico (Sor Beatrice Pedrolli, Rumania).
La mesa redonda ha sido transmitida en video-conferencia. Ha sido un primer intento, que prometemos repetirlo – y mejorarlo – lo más pronto posible.
Mientras nos congratulamos vivamente con las hermanas del equipo técnico (Secretariado internacional de comunicación), agradecemos también a ustedes por habernos acompañado y seguido.